Calendario de embarazo en la semana 12
Qué sucede con el bebé
El feto, que ha crecido durante 11 semanas, alcanza los 61-65 mm. Su masa es de 9-13 g. En este momento, el futuro bebé está activo y se mueve mucho. Se siente seguro en el líquido amniótico, aunque la madre puede no percibir sus movimientos. El futuro bebé cierra los ojos, abre la boca, le gusta mover los deditos e incluso chuparlos. En sus dedos comienzan a formarse las uñas, y en la piel aparecen los primeros pelos – vello.
En este periodo, en la ecografía, la cabeza parece desproporcionadamente grande, las extremidades son cortas y los brazos más largos que las piernas. El órgano de la vista ha ocupado su lugar, pero está temporalmente cubierto por los párpados. Detrás de ellos se está formando la retina, la córnea y el cristalino. En la boca comienzan a funcionar los receptores del gusto, y prefiere más el sabor dulce. Se están formando las orejas: en su forma se destacan los lóbulos. Se puede distinguir la nariz y el cuello formado.
Los órganos y sistemas continúan formándose intensamente:
- La caja torácica se ajusta a los movimientos respiratorios;
- La frecuencia cardíaca se estabiliza en cifras de 110-160 latidos por minuto;
- Se perfecciona la estructura de las vías respiratorias;
- Avanza hacia la finalización la formación del sistema digestivo y los órganos urinarios. Al tragar el líquido amniótico, el feto ya es capaz de excretar líquido con la orina. El hígado intenta formar bilis;
- Los procesos hematopoyéticos están activos: en su sangre comienzan a aparecer leucocitos;
- Comienza la síntesis de hormonas y enzimas para la digestión de la glucosa;
- El cerebro se forma intensamente. En él se pueden distinguir dos hemisferios, el bulbo raquídeo y el cerebelo. Son ellos los que reciben las señales que llegan desde la periferia, ya que la médula espinal aún no está perfeccionada;
- Continúa la formación del esqueleto y el aumento de la masa muscular;
- Se establecen conexiones neuromusculares y reflejas;
- En la ecografía ya se pueden observar los primeros signos sexuales primarios.
Al final del tercer mes obstétrico, el feto se ha convertido gradualmente en un embrión que se asemeja a un niño en miniatura. A partir de este momento, comienza a crecer y fortalecerse, como lo demuestra el hecho de que en los últimos 12-14 días su tamaño se ha duplicado.
La piel está teñida de color rojo. Este efecto visual se debe al escaso grosor de la dermis y a la transparencia de los vasos sanguíneos a través de ella. En la piel comienzan a ubicarse las terminaciones nerviosas, lo que permite al pequeño aprender a conocer el mundo que le rodea. Sin embargo, este mundo es diferente para él: solo reacciona a los estímulos externos (luz, ruido, sacudidas).
Qué sucede con la mamá
Al final del tercer mes de embarazo, la mujer embarazada ya se ha acostumbrado a su estado. Se siente psicológicamente preparada para interactuar con su futuro bebé y presta atención a las nuevas sensaciones. En este período, la naturaleza le otorga un "bono": desaparece la toxicosis y se estabiliza el equilibrio hormonal normal. Esto conduce a la restauración de la rutina diaria habitual, la regulación de las comidas y un estado de ánimo positivo.
Leves dolores en la parte baja del abdomen de carácter tirante. Se produce una distensión del aparato ligamentoso que sostiene el útero, el cual ha aumentado 10 cm para la semana 12.
Aumento de peso. A pesar de que el tamaño del abdomen de la mujer prácticamente se mantiene en el mismo nivel, su apetito aumenta considerablemente. Pueden aparecer antojos atípicos por ciertos alimentos. El peso aumenta entre 1,5 y 3,5 kg.
Actividad hormonal. Debido al aumento de la actividad de la prolactina, es posible la secreción de calostro de los conductos mamarios. Las glándulas mamarias se están preparando para la producción de leche. Al mismo tiempo, las ganas de ir al baño se vuelven menos frecuentes, lo cual puede explicarse por la estabilización del equilibrio hormonal. Las glándulas suprarrenales producen mucho estrógeno, progesterona y hormona estimulante de melanocitos. La melanina, al concentrarse en ciertas áreas, crea hiperpigmentación.
Estado del cabello. Para la semana 12, el cuerpo de una mujer embarazada acumula estrógenos, lo que hace que el cabello se vuelva voluminoso y elástico. Sin embargo, a medida que se acerca el parto y los niveles hormonales vuelven a su estado inicial, el cabello puede comenzar a caerse activamente.
Estado de las uñas. A menudo, debido a la falta de proteínas en el cuerpo, las uñas pueden volverse delgadas y quebradizas. Desde la base misma, pueden aparecer surcos, manchas blancas, la superficie se vuelve áspera y con protuberancias. Por otro lado, el aumento del nivel del mismo estrógeno puede hacerlas más duras y estimular su rápido crecimiento.
Cambios en el estado de la piel. La disminución de la progesterona en la sangre puede causar una reducción de la elasticidad de la dermis. El estrógeno reduce la intensidad de la secreción sebácea realizada por las glándulas de la piel. Esto provoca sequedad y descamación de la piel. Se vuelve muy sensible y puede reaccionar con irritación a cualquier impacto. Pueden aparecer acné.
Trastornos en el funcionamiento del tracto gastrointestinal:
- Acidez. Surge como consecuencia del reflujo del contenido ácido del jugo gástrico hacia el esófago. Esto ocurre debido a la relajación de los músculos de la válvula que cierra la entrada del esófago desde el estómago. La hormona progesterona, producida por la placenta, tiene un efecto espasmolítico sobre los músculos.
- Mayor producción de gases. Es provocada por la relajación de los músculos del intestino y la ralentización del tránsito del bolo alimenticio a través de él. El meteorismo aumenta a medida que crece el feto, debido a la presión de las paredes del útero sobre la cavidad abdominal. Esto ralentiza los procesos de digestión y crea condiciones para la formación interna de gases.
- Estreñimiento. Un proceso que tiene un mecanismo de desarrollo similar al meteorismo. El lento tránsito de los alimentos por el tracto digestivo se debe a la reducción al mínimo de su peristaltismo. La consecuencia es la evacuación intestinal tardía y el desarrollo de estreñimiento. La situación puede mejorar con una dieta rica en fibra.
Dolores en la zona pélvica, en la parte baja de la espalda y en la columna vertebral. Por lo general, los dolores intensos en la espalda aparecen después del cuarto mes obstétrico, cuando el aparato músculo-esquelético se prepara para el paso del niño a través del canal de parto. Una sintomatología similar en la semana 12 o antes puede ser provocada por un estilo de vida sedentario. Esto se explica por fenómenos de estasis en los órganos pélvicos y la debilidad de su musculatura.
Hinchazón de las extremidades. El cambio en el equilibrio hormonal contribuye al aumento de la cantidad de sodio en la sangre y en los órganos internos. Este elemento químico atrae líquidos, lo que favorece su acumulación general en el organismo. Este mecanismo no solo puede causar hinchazón, sino también provocar el desarrollo de varices. Según los datos publicados, hasta el 45% de las embarazadas notan la presencia de hinchazón hacia la semana 12.
Dolor de cabeza. Puede ser causado por las siguientes razones:
- anemia;
- insomnio;
- estrés;
- condiciones meteorológicas desfavorables;
- hiper- o hipotensión;
- osteocondrosis;
- enfermedades catarrales;
- exacerbación de enfermedades crónicas.
Un síntoma como el dolor de cabeza no afecta al desarrollo del embarazo ni al estado de salud del feto, pero la depresión que se desarrolla no pasa desapercibida.
Estado del útero. El útero en la semana 12 de embarazo se vuelve cuatro veces más grande de lo habitual. Su fondo se encuentra prácticamente al nivel de la parte superior de la sínfisis púbica, a la salida de la pelvis menor.
Cistitis. Según las estadísticas, la cistitis aguda se desarrolla en el 3% de las embarazadas durante el segundo trimestre. Puede ser de naturaleza infecciosa o no infecciosa, y a veces una puede convertirse en la otra. La progesterona, producida por la placenta, debilita las paredes de la vejiga y reduce su resistencia a las infecciones. A medida que el útero crece, su presión sobre los uréteres aumenta. Se observa alcalinización de la orina y, a menudo, glucosuria. Un factor de riesgo para la exacerbación de la cistitis en una embarazada en la semana 12 es la presencia de enfermedades del sistema urinario en el historial médico antes del embarazo.
Aumento de las secreciones vaginales. Si en el primer trimestre del embarazo el cuerpo está dominado por la progesterona, a partir de la semana 13 aumenta el papel del estrógeno. La semana 12 es de transición, por lo que la secreción de las glándulas vaginales tiene características especiales. Normalmente, las secreciones deben ser moderadas. Son de un tono blanquecino o claro, con un ligero olor ácido. Si el carácter de las secreciones cambia, especialmente si aparece moco, pus o coágulos de sangre, hay un proceso inflamatorio. Es peligroso cuando es causado por enfermedades venéreas. Los síntomas adicionales en estos casos son picor o sensación de ardor. El tratamiento de esta condición debe ser realizado por un médico.
Dispersión, deterioro de la memoria. Para confirmar la frecuencia de este síntoma, han aparecido términos humorísticos como "mamnesia"y "embarazo cerebral". Los científicos explican este fenómeno como una necesidad evolutiva. El cerebro de una mujer embarazada intenta protegerse de un exceso de información para poder concentrarse en su estado y en el futuro bebé. Además, la sensación de fatiga mental es iniciada por la progesterona y la oxitocina. Este es el desencadenante para un debilitamiento general de la memoria.
Inestabilidad del estado de ánimo. Una embarazada en la semana 12 puede quejarse de altibajos emocionales y sensaciones de ansiedad. Puede experimentar lágrimas sin motivo aparente, varias veces al día. La causa de estos cambios de humor es la síntesis activa de hormonas. Para ayudar al cuerpo a lidiar con este estado, pueden ser útiles ejercicios físicos ligeros, yoga para embarazadas, autotraining y dedicarse a actividades que le gusten.
Calambres en las extremidades inferiores, especialmente por la noche. Están causados por la falta de calcio y magnesio en el cuerpo, así como por fenómenos de estasis en la pelvis menor.
Aumento de la fuerza y frecuencia de los latidos del corazón. El feto en crecimiento requiere un suministro considerable de nutrientes y oxígeno disuelto. Debido a esto, el volumen del flujo sanguíneo aumenta. El corazón se ve obligado a trabajar con mayor carga y alta eficiencia. El ritmo intensificado de su funcionamiento es característico del final del tercer y comienzo del cuarto mes obstétrico.
Propensión a los resfriados. Las infecciones respiratorias agudas frecuentes son el resultado de una disminución de la inmunidad en el organismo femenino. Su sistema inmunológico lleva 11 semanas trabajando por dos, por lo que los recursos se agotan. A esto contribuyen la falta de vitaminas, una alimentación inadecuada o irregular, la ingesta descontrolada de medicamentos, enfermedades del sistema gastrointestinal, el exceso de calorías en la comida, el estrés, la falta de ejercicio físico normal, y las alteraciones en el régimen de trabajo y descanso. A medida que el feto desarrolla su propia inmunidad, la madre puede desarrollar anemia por deficiencia de hierro, otro factor de riesgo para la disminución de la inmunidad.
Desarrollo de gemelos
La semana 12 es el período en el que se puede determinar claramente si uno o varios fetos se están desarrollando en la cavidad uterina. Es posible observar sus movimientos en una ecografía y escuchar los latidos de sus corazones.
Los fetos en un embarazo múltiple se desarrollan de manera similar a un embarazo único, solo que el tamaño del vientre de la mujer es mayor.
El peso de un embrión de gemelos en este período es en promedio de 20g, y su longitud es de 5,3 cm. No siempre estos parámetros son iguales. Los médicos no se preocupan por esto, ya que todo depende del lugar de implantación del embrión en el útero.
Examen médico
Entre las semanas 11 y 12 es el periodo en el que una mujer embarazada debe someterse a un examen exhaustivo, conocido como cribado. Este está dirigido a detectar patologías congénitas graves, incluidas las de naturaleza cromosómica y genética. En esta etapa es crucial determinar si el desarrollo del feto se ajusta a las normas establecidas y si la placenta está funcionando correctamente.
Al final de la semana 12, en la "documentación médica"deben estar los informes de los siguientes especialistas:
- obstetra-ginecólogo. Según los resultados de su examen, puede ser necesaria una consulta con un genetista;
- oftalmólogo;
- otorrinolaringólogo (ORL);
- neurólogo;
- médico de cabecera;
- dentista;
- endocrinólogo.
Si hasta la semana 12 no se ha realizado el conjunto de estudios necesarios para el primer trimestre, estos deben llevarse a cabo. La lista incluye los siguientes análisis:
- análisis de sangre para determinar el contenido de proteína PAPP-A;
- análisis de sangre para medir el nivel de HCG;
- análisis clínico general de orina;
- análisis clínico general de orina;
- realización de un test de proteína en sangre;
- cultivo microbiológico de orina;
- análisis de sangre en la reacción de Wassermann;
- test de suero sanguíneo para VIH, hepatitis B y C, infecciones TORCH;
- análisis bioquímico de sangre;
- citología del contenido vaginal;
- análisis de flora y sensibilidad;
- análisis de sangre para medir el contenido de azúcar y la tolerancia a la glucosa;
- elaboración de un coagulograma;
- análisis de sangre para determinar el grupo sanguíneo y el factor Rh.
En caso de sospecha de amenaza de aborto, se realizará un análisis para medir los niveles de progesterona y TSH. Si hay indicaciones, se realizará un estudio de la placenta para detectar anomalías cromosómicas en el feto.
Procedimientos
- Ecografía. En esta etapa, el estudio se llama cribado prenatal. Es necesario para evaluar el riesgo de desarrollo del feto;
- colposcopia – si es necesario;
- electrocardiograma.
Si hay indicaciones especiales, se prescriben exámenes instrumentales altamente especializados que permiten evaluar objetivamente el estado de salud de la embarazada.
Dificultades en el embarazo
La semana 12 es un período relativamente tranquilo y equilibrado del embarazo, pero en algunos casos existen dificultades para llevarlo a término.
Amenaza de aborto. Las causas de esta condición pueden ser el desequilibrio hormonal, anomalías genéticas, enfermedades infecciosas y parasitarias, trastornos inmunológicos, patologías en la estructura de los órganos del sistema reproductor. La esencia de los trastornos hormonales radica en la insuficiente síntesis de progesterona, que puede ser de carácter adquirido o congénito. La patología genética implica mutaciones anormales de los cromosomas, que forman un feto no viable. Pueden surgir como resultado de la exposición a radiación, el consumo de alimentos que contienen organismos genéticamente modificados y teratógenos. Entre los agentes infecciosos capaces de provocar un aborto espontáneo, es importante destacar el virus de la rubéola, que puede afectar a un organismo no vacunado. Los trastornos inmunológicos consisten en la producción de anticuerpos por parte del organismo materno que son hostiles al feto. Esta patología es el resultado de procesos autoinmunes que surgen por razones que aún no están suficientemente estudiadas.
El embarazo se lleva con dificultad en el contexto de funciones alteradas de la glándula tiroides. Esto se explica por la deficiencia de hormonas que contienen yodo, necesarias para un embarazo fisiológico normal.
La estructura de los órganos sexuales de la mujer tiene una importancia crucial como factor de riesgo para el aborto espontáneo. Por ejemplo, la insuficiencia istmico-cervical, que es un desarrollo deficiente del cuello uterino, pone en riesgo la retención del feto dentro del útero. Entre las patologías del grupo de riesgo se encuentran la endometriosis y los miomas de diversa naturaleza.
Síntomas principales. Las quejas que pueden hacer sospechar un aborto espontáneo son:
- dolores en la parte baja del abdomen;
- malestar en forma de contracciones, causado por el aumento del tono muscular del útero;
- secreciones vaginales que difieren en cantidad y características de las normales.
La amenaza de aborto espontáneo puede surgir como consecuencia del estrés, traumatismos, intoxicación por sustancias químicas, exacerbación de enfermedades crónicas, consumo de alcohol, tabaquismo y reacciones alérgicas graves.
Los dolores tirantes o en forma de contracciones pueden aparecer en la región baja del estómago y desarrollarse como consecuencia de la acción del factor causal. El huevo fetal, al comenzar a desprenderse de la placenta, sufre una falta de suministro de sangre, lo que significa que experimenta una deficiencia de nutrientes y oxígeno.
Edad de la futura madre. Con la edad de la mujer embarazada, la amenaza de no llevar a término el embarazo aumenta. Así, cerca de los cuarenta años, el riesgo de aborto espontáneo es del 33%, mientras que para las mujeres de 30 años el porcentaje apenas alcanza el 10%.
Edad del futuro padre. Numerosos estudios científicos confirman el hecho de que hay un alto porcentaje de abortos espontáneos en embarazos de hombres cuya edad supera los 40 años.
Salud de la mujer. El riesgo de terminar el embarazo con un aborto espontáneo aumenta en mujeres que tienen enfermedades de la tiroides o que padecen diabetes.
Factores ambientales adversos. El embarazo en la semana 12 puede interrumpirse después de estar en una empresa donde en el aire de la zona de trabajo hay sustancias tóxicas, vapores de algunos medicamentos. La radiación electromagnética, la vibración, la radiación, la inhalación de aerosoles de compuestos químicos tóxicos también tienen un efecto negativo.
Los obstetras-ginecólogos dividen las causas de los abortos espontáneos en aquellas que pueden surgir en cualquier etapa del embarazo y aquellas que son características de períodos específicos. Así, las infecciones de transmisión sexual, la hepatitis parenteral, la diabetes, el estrés son una lista de factores de riesgo que pueden provocar un aborto espontáneo en cualquier momento. Al mismo tiempo, las anomalías cromosómicas graves son un factor de riesgo de aborto espontáneo en el primer trimestre. A esto se suman las toxicosis severas, la insuficiencia hormonal y las alteraciones del feto a nivel genético.
Aborto habitual. Es una condición en la que una mujer no puede llevar a término un embarazo en varias ocasiones consecutivas. En tal caso, antes de intentar un nuevo embarazo, es necesario realizar un examen completo a ambos futuros padres para determinar su estado de salud objetivo.
No son raros los casos en los que la influencia de los factores de riesgo de aborto se produce de manera combinada. En tal situación, se le recomienda a la mujer ingresar en un hospital para tratar oportunamente las condiciones patológicas con medicamentos.
Qué se puede y qué no se puede
Asegurar el buen desarrollo del embarazo y la llegada al mundo de un bebé sano es la tarea número uno para la futura mamá. Lograr el resultado deseado es posible si se cumplen una serie de prohibiciones durante el embarazo.
Qué PUEDE hacer la futura mamá:
- realizar ejercicios físicos diseñados para mujeres embarazadas;
- nadar en la piscina y en cuerpos de agua abiertos con agua de calidad garantizada;
- recibir masajes suaves para embarazadas;
- tomar baños tibios y relajantes preparados con infusiones de hierbas;
- tomar vitaminas y microelementos recomendados por el ginecólogo, teniendo en cuenta el tiempo de embarazo;
- pasear al aire libre tanto como sea posible;
- cuidar de su apariencia sin usar productos que contengan fragancias artificiales;
- disfrutar de actividades que le proporcionen emociones positivas: pintar, fotografiar, bordar, tejer, etc.;
- asistir a cursos para embarazadas;
- ir a exposiciones, conciertos;
- elegir la ropa y el calzado necesarios teniendo en cuenta sus características individuales;
- tener relaciones sexuales con cuidado y con una pareja de confianza;
- controlar su peso, elaborando un menú adecuado.
Qué NO PUEDE hacer la futura mamá:
- consumir alimentos que contengan saborizantes, mejoradores artificiales del sabor, conservantes;
- beber refrescos;
- no seguir una rutina diaria, dormir poco, no estar al aire libre;
- no fortalecer tu cuerpo con los ejercicios físicos adecuados;
- andar en bicicleta y medios de transporte similares;
- visitar saunas, baños rusos, solariums;
- permanecer mucho tiempo bajo el sol brillante, bajo radiación ultravioleta;
- trabajar en una empresa donde el aire de la zona de trabajo contenga altas concentraciones de sustancias tóxicas y nocivas;
- tomar medicamentos sin prescripción médica;
- contactar con personas enfermas de infecciones;
- saltar desde alturas y hacer carreras de fondo;
- usar ropa de materiales sintéticos;
- elegir estilos de ropa que restrinjan el crecimiento del abdomen, la preparación de las glándulas mamarias para la producción de leche;
- usar zapatos que aprieten los pies y tengan un tacón alto;
- trabajar mucho tiempo en el ordenador, permaneciendo en una postura forzada;
- experimentar grandes cambios de temperatura ambiental;
- estar en zonas sísmicamente peligrosas, visitar países exóticos;
- consumir frutas exóticas;
- cuidar de los animales, teniendo tendencia a desarrollar alergias;
- trabajar en lugares mal ventilados, con condiciones laborales perjudiciales: costureras, constructores, pintores, desinfectadores, etc.
- negarse a pasar revisiones médicas y a realizar análisis;
- consumir alimentos y platos fritos, ahumados, con gran cantidad de especias. Están prohibidos los tipos de carne y pescado grasos, la comida rápida, el té y el café fuertes;
- consumir alcohol, fumar, tomar drogas.
Alimentación adecuada
La organización de una alimentación completa para una mujer embarazada es necesaria para crear condiciones óptimas para el funcionamiento del organismo único "madre-hijo". El carácter saludable de la alimentación se determina por la calidad de los productos y los métodos de preparación de los platos.
En la semana 12 de embarazo se recomienda:
- Renunciar a la comida rápida y consumir solo productos de calidad garantizada. La comida preparada con conservantes, aromatizantes, potenciadores de sabor sintéticos y artificiales es inaceptable;
- Al elegir la dieta, no incluir alimentos grasos, demasiado calóricos, condimentados con una gran cantidad de especias, salsas picantes y saladas, aderezos;
- No consumir productos de origen animal crudos o en forma de semielaborados, ya que pueden contener microflora patógena y helmintos;
- Cocinar los platos de manera que se conserven al máximo las vitaminas y los microelementos: hervido, horneado, estofado. Seguir estrictamente las tecnologías de preparación de los platos;
- Enriquecer tu mesa con vitaminas C, E y zinc. Estos se encuentran en los mariscos, las legumbres y las coles de Bruselas. Protegen la placenta de daños y fortalecen el sistema inmunológico. Consumir una cantidad suficiente de yodo. Su participación es necesaria para el correcto funcionamiento de la glándula tiroides en la madre y el futuro bebé;
- Consumir alimentos que contengan ácido fólico. Este es responsable de la formación de tejidos, preserva el conjunto genético del ADN y participa en la síntesis de aminoácidos.
- Incluir en la dieta diaria frutas, verduras, hierbas y cereales integrales. Si tienes problemas con el tracto gastrointestinal, es mejor consumir las frutas que causan fermentación en forma horneada. Además, esto reducirá el riesgo de acidez y el desarrollo de meteorismo.
- Al preparar ensaladas, elegir yogur bajo en grasa o aceite vegetal como aderezo. Una buena opción es el aceite de oliva, que es rico en ácidos grasos saturados e insaturados.
- Para los primeros platos, no usar caldos de carne saturados. Son más saludables los caldos de verduras y las sopas ligeras de pollo.
- Son beneficiosos los guisos de verduras, los surtidos de verduras al horno y los platos de verduras con cereales.
- Al elegir cereales, es mejor optar por el trigo sarraceno, la avena, el mijo y la cebada perlada. El trigo sarraceno es rico en hierro, útil para la prevención de la anemia y fortalece el sistema inmunológico. Casi no contiene grasa y es rico en proteínas. El mijo fortalece el músculo cardíaco, retiene la humedad en las células y elimina los restos de antibióticos. La cebada perlada tiene efectos antibacterianos y antivirales.
- No beber bebidas gaseosas ni zumos sintéticos. Son beneficiosos los zumos de frutas del bosque y los compotas de frutas secas. La elección de zumos naturales depende del nivel de acidez del jugo gástrico de la embarazada.
- Al elegir pescado, optar por el salmón, la caballa, el arenque, la sardina y el jurel. Son ricos en nutrientes beneficiosos, incluyendo Omega-3, contienen proteínas completas y fácilmente digeribles, vitaminas A y D, calcio y fósforo, necesarios para fortalecer el aparato óseo-muscular del bebé.
En la semana 12, el placer de los alimentos favoritos debe combinarse con su beneficio. Dado que se completa el desarrollo del feto y la placenta, el cuerpo necesita aceite de pescado y huevos, verduras y frutas, cereales, carne magra de pavo, ternera y cerdo. Los productos lácteos son indispensables. Es mejor cocinar en casa, ya que solo así se puede garantizar la calidad de los productos utilizados.
Necesidad de vitaminas y minerales
Al final del tercer mes obstétrico, la formación del feto está prácticamente completada. Lo que queda por delante es el aumento de la masa muscular, el ajuste del funcionamiento de los órganos y sistemas, y el desarrollo de un sistema nervioso completo. En estos procesos, el embrión necesita de manera crucial vitaminas y minerales. Al alimentarse a través de la placenta, debe obtener todo lo necesario del organismo de la madre. Por lo tanto, su dieta debe incluir:
Vitamina A
El retinol es esencial para la nutrición del futuro bebé, lo cual es especialmente relevante al inicio del segundo trimestre. La falta de retinol puede resultar en el nacimiento de niños con bajo peso. Es un participante activo en la formación del tejido epitelial, que recubre el tracto gastrointestinal, el sistema urinario, los órganos reproductivos y la piel. El consumo equilibrado de vitamina A es importante para el crecimiento y desarrollo del embrión. Regula la regeneración genética de células y tejidos, asegura la eficacia de la función barrera del hígado y mejora la eficiencia de la actividad de los leucocitos y linfocitos. Puede existir en dos formas: vitamina A lista y carotenoide, que es un provitamina A. Una vez dentro del organismo, el provitamina A se convierte en vitamina A completa. Las fuentes de carotenoides son las verduras, especialmente las zanahorias, especias y frutas. La vitamina A se encuentra en el hígado de ternera, yemas de huevo y mantequilla. También es abundante en melocotones, melones, calabaza, brócoli, salvia, albahaca, aceite de pescado, hígado de bacalao y mantequilla. La dosis diaria recomendada es de 600-800 mcg.
Vitamina B1
Tiamina - el análogo funcional del nombre es "coenzima". Activa las proteínas que participan en las reacciones bioquímicas del organismo. En la práctica, su acción se manifiesta en el aumento de la eficiencia de la producción de energía a partir de los alimentos, en la síntesis de ácidos nucleicos. Gracias a la tiamina, en el organismo embrionario en desarrollo se mejora la conducción de los impulsos nerviosos y se normaliza la función cardíaca. En la etapa de formación del sistema nervioso, la tiamina desempeña un papel importante. Las mejores fuentes son la levadura de cerveza seca, la carne de cerdo y de ternera, pescados como la anguila y el atún, frutos secos, cereales integrales, legumbres, patatas y judías.
Vitamina B2
La riboflavina es la base de la mayoría de las células del cuerpo humano. Cuando hay una cantidad suficiente, se produce con éxito la conversión de los carbohidratos de los alimentos en energía, se neutralizan los "radicales libres"que son dañinos para las células del ADN. Las funciones principales de la B2, especialmente importantes para las embarazadas, incluyen la normalización del metabolismo energético y del metabolismo del hierro en el organismo. Una mujer que toma la dosis diaria necesaria de riboflavina nota un buen estado de la piel y las membranas mucosas, emociones saludables y buen humor. Se cansa menos y descansa de manera más efectiva durante el sueño. Se encuentra en la leche y productos lácteos, carne magra, huevos, verduras de color verde, cereales y granos.
Vitamina B5
El ácido pantoténico es una sustancia que ayuda en la absorción de nutrientes y otras vitaminas. Estimula el desarrollo de las glándulas suprarrenales, influyendo en el aumento del nivel de cortisol. Participa en la construcción de células nerviosas y cadenas nerviosas. Es necesario para la síntesis de colesterol, ácidos grasos y esteroides. Aumenta la resistencia del cuerpo a enfermedades y estrés. Si una mujer embarazada se ve obligada a tomar antibióticos, el ácido pantoténico reducirá su efecto tóxico. La necesidad diaria es de 6 mg. Se puede obtener de 100 g de hígado de ternera, 770 g de salmón guisado o 230 g de cacahuetes.
Vitamina B7
La biotina es el gestor de los procesos metabólicos. Asegura el crecimiento adecuado del feto, ayudando a concentrar en él los nutrientes necesarios. Para la futura mamá, su importancia radica en el fortalecimiento del cabello, las uñas y la protección de la piel. La vitamina B7, desempeñando un papel determinado en la formación del embrión, normaliza el metabolismo energético y tiene un efecto positivo en el funcionamiento del sistema nervioso. Las fuentes de biotina son la yema de huevo, los frijoles de soja, los frutos secos, la levadura, el hígado y los riñones de ternera, los cereales. Se encuentra en menor cantidad en la carne, las verduras y las frutas.
Vitamina B6
La piridoxina, o vitamina B6, es esencial para la síntesis de eritrocitos y proteínas. Mantiene el metabolismo de los aminoácidos y garantiza un sueño saludable. Influye en el curso de los procesos metabólicos y en el crecimiento de los tejidos cerebrales y nerviosos. En las mujeres, la deficiencia de B6 provoca toxicosis, vómitos, mal sueño y apetito. Se encuentra en el hígado, el pan integral, las legumbres y los cereales.
Vitamina B12
La vitamina B12 participa en la producción de aminoácidos. Es necesaria para el bienestar del sistema nervioso e inmunológico. Se encuentra en los productos lácteos fermentados, la levadura de cerveza, los huevos y la soja. En conjunto, estas vitaminas tienen un efecto positivo en el desarrollo del feto y en los procesos metabólicos que ocurren en él. Son esenciales para la formación de los sistemas endocrino, inmunológico y cardiovascular del embrión.
Ácido fólico
El ácido fólico es responsable de la integridad del ADN, que influye en el crecimiento celular. Es muy importante para la formación de la placenta. La falta de ácido fólico afecta negativamente al tubo neural del embrión. En mujeres embarazadas, puede provocar un aborto espontáneo. La deficiencia de ácido fólico afecta negativamente al funcionamiento del corazón y al tono de los vasos sanguíneos. Es especialmente importante durante la etapa de formación del sistema nervioso del embrión. Además, activa la función hematopoyética. Se encuentra en el queso duro, el requesón, la yema de huevo, los tomates y las judías. La necesidad diaria es de 400 mcg.
Vitamina C
Cuando hay deficiencia de este, la síntesis de colágeno se ve afectada. El crecimiento del embrión en la semana 12 está directamente relacionado con estos procesos. La vitamina C facilita la absorción del hierro de los productos vegetales. Es un potente inmunoestimulante. Protege a los organismos del niño y de la madre de infecciones, ayuda en la respuesta a reacciones alérgicas: es un inhibidor de la histamina. Es importante por su capacidad para neutralizar los radicales libres. La vitamina C – ácido ascórbico – participa en la formación de neurotransmisores, especialmente si se toma en conjunto con la vitamina E. La falta de vitamina C puede llevar a enfermedades cardiovasculares, así como al crecimiento de células tumorales. Además, si el organismo de una embarazada recibe poco de este, la mujer se vuelve irritable, apática, tiene menos apetito y es más susceptible a infecciones. Son ricos en vitamina C la grosella negra, el pimiento morrón, las verduras, los cítricos y el escaramujo. La ingesta diaria necesaria es de 85 mg.
Vitamina D3
El colecalciferol es necesario para la absorción del calcio y el fósforo. Existe un segundo nombre para la vitamina: el director hormonal. Se puede obtener consumiendo hígado de ternera, levadura de cerveza, productos lácteos, huevos y mantequilla.
Tocoferol (vitamina E)
Fortalece el sistema inmunológico, favorece la fuerza muscular, lo cual es especialmente importante durante el período de aumento de su masa. El tocoferol previene el desarrollo de la anemia y protege contra los efectos negativos de los factores ambientales. En combinación con la vitamina C, participa en la prevención de la aterosclerosis. Para una mujer embarazada, el tocoferol es especialmente importante, ya que reduce la probabilidad de desarrollar calambres en las piernas y participa en la respiración tisular. Se encuentra en las espinacas, aceites vegetales, nueces, gambas, espárragos y semillas de girasol.
Nicotinamida
La vitamina PP es un componente necesario para el crecimiento del feto. Se encuentra en las enzimas que proporcionan oxígeno y nutrientes a las células. Influye positivamente en la formación y funcionamiento de los sistemas digestivo y cardiovascular, estabiliza el colesterol y previene el desarrollo de trombosis. Participa en la síntesis de hormonas importantes: tiroxina, insulina, cortisol, progesterona, testosterona y estrógenos. Al tomar nicotinamida, la mujer realiza una prevención de la hipoxia en su futuro hijo. Se puede obtener vitamina PP de los alimentos si se consumen hígado de ternera, huevos, cerdo, pescado, tomates, zanahorias, dátiles, brócoli, maíz, trigo sarraceno y trigo.
Vitamina K
La filoquinona es un participante crucial en la síntesis de proteínas que regulan la coagulación de la sangre. Es necesaria en el cuerpo de una mujer embarazada en la semana 12 para normalizar la función renal y ayuda al hígado a ejercer su efecto desintoxicante. Influye en la densidad del tejido óseo y previene la osteoporosis. Reduce el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares y mantiene un nivel normal de presión arterial en la semana 12. Se encuentra en alimentos como el brócoli, la lechuga, el eneldo, el cilantro, el perejil, las espinacas, los tomates verdes, los productos lácteos, el hígado, los huevos, el salmón y el lenguado, la soja. La dosis diaria recomendada para mujeres embarazadas en el segundo trimestre es de 100 mcg.
Vitamina P
El rutozido es conocido por su efecto antioxidante y antiinflamatorio. Es especialmente beneficioso para el futuro bebé, ya que participa en el desarrollo de la corteza cerebral. En la semana 12 del embarazo, protege los capilares de la destrucción y muestra un efecto antiviral intracelular. Para la mujer, es una prevención contra las varices.
Luteína
Influye en el desarrollo adecuado de los órganos de la visión y del cerebro en general. La ingesta de luteína desde el exterior es especialmente importante para las mujeres embarazadas mayores de 30 años. Se encuentra en alimentos como la col rizada cruda, las espinacas, las hojas de diente de león, el pimiento y las hojas de nabo.
Al comienzo del cuarto mes obstétrico, una mujer embarazada y su feto necesitan no solo vitaminas, sino también minerales. Sin su presencia en la dieta, el niño puede comenzar a desarrollar procesos negativos e irreversibles. Los minerales necesarios se dividen en macro y microelementos.
Según la recomendación de la OMS, las mujeres en la semana 12 de embarazo necesitan:
Yodo
Es importante para el desarrollo de las capacidades mentales y físicas. La deficiencia de yodo conduce a fallos en la formación del sistema nervioso y puede provocar un aborto. El embrión no gana peso adecuadamente y puede morir. Se encuentra en el pescado de mar, mariscos, manzanas, verduras, y en menor cantidad en la carne. La dosis diaria es de 200 mcg.
Zinc
Es un potente inmunomodulador. Sin él, se forman defectos en el desarrollo de órganos y sistemas, lo cual es especialmente peligroso para el tubo neural del feto. La falta de zinc puede tener un efecto destructivo sobre el feto. La deficiencia de zinc a menudo resulta en el nacimiento de bebés inmaduros y con bajo peso. Se encuentra en naranjas, higos, manzanas, cerezas, tomates, huevos, queso, nueces, semillas de girasol y calabaza, guisantes, frijoles y trigo sarraceno.
Hierro
Es necesario para la prevención de la anemia en la embarazada y su feto. Como resultado de su falta, el embrión sufre de hipoxia, y la madre puede comenzar a tener hemorragias uterinas. La deficiencia de hierro debilita el sistema inmunológico, el organismo se vuelve susceptible a las bacterias y virus patógenos. La anemia ferropénica se presenta en 9 de cada 10 mujeres embarazadas. El contenido de hierro es alto en la carne, vísceras, pescado y aves.
Calcio
Es conocida su importante función en la formación del aparato osteomuscular. Es necesario para el sistema nervioso, el músculo cardíaco, la salud de los futuros dientes y el cabello. Sin él, no se puede desarrollar adecuadamente los tejidos internos, incluidos los ojos y los oídos. Se encuentra en productos lácteos y fermentados, hígado de bacalao, pan de centeno, bayas, guisantes, lentejas y sésamo.
Magnesio
Es especialmente necesario en el segundo trimestre del embarazo. En combinación con la vitamina B6, influye en la capacidad de los músculos para relajarse, lo que es una prevención eficaz de las varices en la embarazada. Además, el magnesio puede controlar los procesos de excitación en el sistema nervioso, calma y promueve un sueño saludable.
Manganeso
Es una parte importante de la secreción de insulina. También regula el nivel de colesterol. Para el organismo infantil en desarrollo, es importante su participación en la condrogénesis y la mineralización de los huesos. La dosis diaria es de 2,5 mg. Se encuentra en el salvado de avena y trigo, piñones, pistachos, sémola de trigo, semillas de girasol, arroz y soja.
Cromo
Conocido regulador del nivel de azúcar en la sangre, es importante para el metabolismo de los carbohidratos, y controla la permeabilidad de las membranas celulares. Facilita la acumulación de glucosa en las células y potencia la acción de la insulina. Ayuda a combatir las disfunciones de la glándula tiroides. La dosis diaria es de 50 mcg. Se encuentra en el pescado: bonito, atún, salmón, y keta. Un poco menos se encuentra en el hígado de res y la carne de pollo cocida. Luego, en términos de valor nutricional, siguen los huevos y la sémola de maíz.
Cobre
El valor del microelemento radica en su participación en la composición de enzimas y hormonas. Sin cobre, no se llevan a cabo los procesos de hematopoyesis, síntesis de hemoglobina, formación de huesos y tejido conectivo. La dosis diaria para las embarazadas es de 3 mg. Mucho cobre se encuentra en el hígado, cacahuetes, avellanas, gambas, guisantes y productos de pasta. Un poco menos se encuentra en el trigo sarraceno, arroz y trigo.
Selenio
Tiene la reputación de ser un potente antioxidante. Sin él, no se produce la hormona tirotrópica, que juega un papel en la normalización de las funciones de la glándula tiroides. En mujeres embarazadas con deficiencia de selenio, a menudo se observa debilidad en el trabajo de parto y otras complicaciones durante el parto. La dosis recomendada es de 20-100 mcg al día. El selenio se encuentra en abundancia en el pescado, los mariscos, el pan integral, las nueces de Brasil, las semillas, el arroz integral, la cebada, la quinoa, los copos de avena, las semillas de chía, de sésamo y de lino.
Entre los oligoelementos necesarios también se incluyen:
¡Importante! Elija un complejo multivitamínico según la recomendación de su médico, su ginecólogo-obstetra y/o terapeuta.
Consejos útiles
La semana 12 es el momento en que el feto se ha convertido en un embrión. En las semanas siguientes, crecerá, ganará peso y formará tejido muscular. Sin embargo, el organismo de la futura madre ya está bastante agotado y necesita reponer vitaminas y minerales. Por lo tanto, es necesario tomar con cuidado todos los medicamentos recetados por el médico, así como organizar una alimentación completa y racional. Es mejor preparar la comida uno mismo, utilizando productos recomendados individualmente.
A pesar de que en esta etapa la mujer se vuelve más tranquila y deja de sufrir de náuseas matutinas, la carga sobre su organismo aumenta. El vientre en crecimiento cambia toda su postura, y la pigmentación que aparece introduce rasgos indeseados en su apariencia. El hombre debe evitar que la futura madre caiga en la depresión por este motivo. Sus palabras deben reflejar admiración por su floreciente feminidad. La mujer no debe dudar de su atractivo y singularidad.
Ejercicios para futuras mamás
Los ejercicios de fitness para mujeres en la semana 12 de embarazo deben ser equilibrados y suaves. Están contraindicados:
- los saltos,
- correr,
- los ejercicios de fuerza;
- los ejercicios realizados boca abajo;
- las posturas que impliquen una fuerte tensión de los músculos del suelo pélvico.
Son beneficiosos:
- el yoga o pilates para embarazadas;
- ejercicios de fortalecimiento general para diferentes grupos musculares y activación de la circulación sanguínea;
- movimientos rítmicos y pausados que mejoren la respiración y estimulen los procesos metabólicos.
Malestares durante el embarazo
Dolores en la parte baja del abdomen
Con mayor frecuencia, son de carácter tirante. Son causados por la distensión del aparato ligamentoso debido al aumento del tamaño del útero. Ocurren especialmente en mujeres que no practicaban deporte antes del embarazo. Ayudan ciertos ejercicios físicos dosificados, el uso de ropa interior para embarazadas, incluyendo fajas, y la exclusión del vestuario de prendas que presionen el abdomen y zapatos de tacón alto.
Estreñimiento
Se explica por la compresión del intestino debido al aumento del tamaño del útero. Como resultado, los alimentos dejan de moverse suavemente por el intestino y se estancan. Se observan evacuaciones irregulares y estreñimiento. Una causa similar provoca la hinchazón del abdomen – meteorismo. La condición se corrige consumiendo alimentos con fibra, así como con comidas frecuentes pero no voluminosas. Al ajustar la dieta, es necesario analizar la compatibilidad de los alimentos entre sí.
Acidez
El reflujo del jugo gástrico hacia el esófago ocurre debido a la debilidad del esfínter pilórico. Su tono disminuye bajo la acción del exceso de hormonas producidas durante el embarazo, y también puede explicarse por defectos en la organización de la alimentación. La acidez se puede controlar con comidas fraccionadas y una correcta selección de sus componentes. Beber bicarbonato de sodio en este caso es perjudicial, ya que es un fuerte irritante para las membranas mucosas.
Picor o ardor en la zona vaginal
Es necesario acudir al médico. Es posible que la causa sea una vaginitis o colpitis incipiente. La razón radica en una infección y en el debilitamiento de las defensas del organismo. Los cambios hormonales y las cargas significativas pueden provocar una disbiosis vaginal y, como consecuencia, la inflamación de sus membranas mucosas. La segunda causa del picor puede ser reacciones alérgicas a productos de higiene personal, productos químicos domésticos, alimentos y bebidas alergénicos. Las vaginitis alérgicas se controlan eliminando el alérgeno y tomando antihistamínicos suaves.
Procesos inflamatorios en la boca
Ocurren en enfermedades hereditarias, diabetes mellitus, patologías congénitas del metabolismo. Si una mujer embarazada tiene un desequilibrio hormonal, abusaba del alcohol y el tabaco antes del embarazo, y tiene enfermedades crónicas del tracto gastrointestinal, la inflamación de la mucosa bucal puede ser una señal de problemas serios.
Hipertonía de la musculatura uterina
Es posible que este fenómeno sea causado por el crecimiento intensificado del útero. Sin embargo, para determinar las causas objetivas, se debe acudir al médico. Él ayudará a diagnosticar a tiempo el desprendimiento del huevo fetal y el aborto espontáneo incipiente. En esta etapa es necesaria la hospitalización. El tratamiento es sintomático.
Anemia ferropénica
Se desarrolla en muchas embarazadas debido a la falta de aporte de hierro del exterior. El nivel de hemoglobina en el análisis clínico general de sangre por debajo de 110 lo indica. Es necesario enriquecer la dieta con hierro bivalente y trivalente y vitamina C para su mejor absorción. El tratamiento se realiza bajo control del nivel de hemoglobina.
Calambres, entumecimiento de las piernas
La causa de este síntoma tan molesto es la alteración de la circulación sanguínea en las extremidades inferiores. Es posible que el útero agrandado comprima vasos importantes. La segunda causa es la debilidad del músculo cardíaco, que no puede manejar el aumento del volumen de líquido circulante. Otra causa es la falta de calcio en el organismo. Si el médico no detecta patologías en la salud, se puede solucionar regulando el régimen de actividad, con un ligero masaje en las piernas y evitando un estilo de vida constantemente sedentario.
Cambios de humor
Fondo emocional inestable. Se explica por la hipersíntesis y actividad de las hormonas del embarazo.
Dolores en las glándulas mamarias
Se explican por su preparación para la lactancia. Los senos se hinchan, pueden aparecer secreciones de los conductos mamarios y la piel se vuelve más sensible.
Lista de verificación
- Visita al ginecólogo, que incluye la realización de un examen antropométrico y la inscripción en el registro si no se ha hecho previamente. En la primera consulta, se derivará a la embarazada al oftalmólogo, endocrinólogo, dentista y neurólogo. Si hay indicaciones, puede ser necesaria la consulta con un cirujano, gastroenterólogo o urólogo.
- Análisis general de orina para detectar patologías renales o inflamaciones de otros órganos.
- Análisis general de sangre.
- Cribado prenatal para detectar patologías en el desarrollo del feto, así como el riesgo existente de su aparición.
- Análisis bioquímico de sangre para determinar los niveles de proteínas, lípidos, carbohidratos, sustancias inorgánicas y vitaminas, sustancias nitrogenadas de bajo peso molecular y enzimas.
- Determinación del grupo sanguíneo y su factor Rh.
- Análisis de sangre para VIH, hepatitis parenterales e infección TORCH.
- Frotis para gonorrea.
Los puntos mencionados en la lista son obligatorios para todas las embarazadas en la semana 12. En cada caso individual, dependiendo de las indicaciones, se pueden prescribir análisis adicionales, exámenes instrumentales y procedimientos. Un ejemplo de ello son el electrocardiograma, la ecografía, la encefalografía y la gastroduodenoscopia.
En la semana 12 del embarazo, se puede comenzar a asistir a cursos para embarazadas que incluyan ejercicios físicos obligatorios. Es necesario revisar tu vestuario y adquirir ropa hecha principalmente de materiales naturales. Durante la temporada fría, se recomienda llevar ropa que asegure una buena transpiración.